When I was expecting, a common question family and friends asked me was: “What are you gonna do with Lola when the baby arrives? She’s gonna be super jealous!”. 

I’m not gonna lie: I never liked this question because it wasn’t even an issue for us as a family.  

Lola is a very loved and spoiled doggy, our first baby, the one we share our bed with, and we weren’t thinking about making any significant changes. Spoiler alert: we never did!

It was a no brainer for us, but it impacted me to see how misinformed people are.

When I was looking for tips to introduce Lola and the baby on the internet, I found that many people give their dogs away before bringing the baby home, which is completely insane. Why people like that get a dog in the first place?

I come from a family with no pets, and my parents were concerned about Lola’s behaviour, which made me a complete information freak, but I didn’t find useful info to share, and that’s the main reason for this article.

What can you do if you are expecting and have dogs at home? 

Well, nothing really. Please, please, please, don’t follow those ridiculous “training tips” of paying no attention to the dog a few months before the delivery, which will only make them anxious and confused.

Having a doggy at home is beneficial for your baby. Yes! I’m not making this up just because I love dogs. 

Let me explain:

On the first consultation with our pediatrician, he explained that babies need to ingest microbes to promote a healthy gut microbiome and keep their immune system working well.

This means that babies exposed to dogs are protected against developing immune diseases (like allergies and asthma) in childhood. So, what people commonly think is the other way around.

I was so happy to hear this from an expert: my instinct wasn’t wrong after all. It is even better for the baby that we have a dog before he was born!

But, how can we help our dog to get ready for the new baby coming?

A good tip for the introduction of your babies is keeping the hospital blanket your human baby slept with the first night and put it on the dog’s bed. 

While I stayed at the hospital for a couple of nights, my parents were in charge of Lola. She slept with Santi’s blanket to get used to his scent. 

Introduce them as soon as you get home: say hi to your doggy as you usually do, and with the baby in the car seat and lots of supervision on your side, let your pooch sniff around.

That’s it! Nothing way too dramatic. Give them time to know each other. Your dog will understand that a new puppy joined the pack. 

I promise they’ll start becoming friends as soon as the baby begins to eat, around 6-month old, when the little human becomes a beloved treats-giver.

Regarding the jealousy question: I don’t think dogs get jealous, but they do feel very curious about the new member of the family. They don’t tend to like the baby crying and can become very anxious about it.

Be patient, let them be a little part of your new routine in a safe way. Remember that if you don’t feel comfortable, your pooch will know. 

When I was breastfeeding my newborn (mostly 24/7 haha), Lola had permission to sit on the glider with me. In the beginning, only on my feet. When I felt more comfortable, next to me. This became our everyday ritual until now, nine months later.

We always treat Lola as we did before becoming parents. When I am way too busy with Santi, my husband pays attention to her (and vice versa), and she never feels abandoned. 

I also spend one-on-one time with her every day. It helps me recharge and keeps our bond intact. 

Follow your intuition: everything will fell into place in no time. I know you trust in your pooch, but please NEVER leave your baby and doggy together without supervision. It’s not worth the risk, and 2 seconds can change your life forever.

Enjoy your new family. You’ll find that all the cliches are true: your “first child” looks massive next to the little one (no matter the breed).  

If you still have doubts, please watch the documentary Babies on Netflix. In episode #2, they talk in more detail about how households with pets are beneficial for babies.

Are you expecting? Do you have babies and dogs at home? I’d love to know about your experience. Please let me know down below!

¿Cómo Preparar A Tu Perro Para La Llegada De Un Bebé?

Cuando estaba embarazada, una pregunta que siempre me hacían familiares y amigos era: “¿Qué vas a hacer con Lola cuando llegue el bebé? ¡Se va a poner súper celosa!”.

Sinceramente, nunca me gustó esta pregunta porque tenerla jamás fue un problema para nosotros como familia, todo lo contrario.

Lola es una perrita muy querida y mimada, nuestra primera bebé, con quien compartimos hasta la cama, y ​​la verdad no estábamos pensando hacer ningún cambio especial. Spoiler alert: ¡nunca lo hicimos!

Buscando consejos en internet para presentar a Lola y al bebé al llegar del hospital, me dio mucha tristeza saber que muchas personas regalan a sus perros antes de dar a luz. ¿Por qué gente así piensa siquiera en tener un perrito? La verdad es que no lo entiendo.

Yo vengo de una familia sin mascotas, y mis papás estaban preocupados por la llegada del bebé y la actitud de Lola, por eso me puse a buscar información como loca, pero no encontré nada útil para compartir, y esa es la razón principal de este artículo.

¿Qué hacer si estás esperando un bebé y tienes perros en casa?

Bueno, nada realmente. Por favor, por favor, por favor, no sigas esos “consejos de entrenamiento” que sugieren que no le prestes atención al perro unos meses antes del parto, eso sólo los pondrá ansiosos y confundidos.

Tener un perrito en casa es beneficioso para tu bebé. ¡Si! No estoy exagerando sólo porque amo a los perros.

Déjame explicarte mejor:

En la primera consulta con nuestro pediatra, nos explicó que los bebés necesitan ingerir microbios para desarrollar una microbioma intestinal saludable y mantener su sistema inmunológico funcionando bien.

Esto significa que los bebés expuestos a perros están protegidos contra el desarrollo de enfermedades inmunes (como alergias y asma) durante la infancia. Entonces, lo que la gente comúnmente piensa, viene siendo al revés.

Estaba tan feliz de escuchar esto de un experto: mi instinto no estaba mal después de todo. ¡Es aún mejor para el bebé que tuvieramos un perro antes de que naciera!

Pero, ¿cómo ayudar al perrito a adaptarse al nuevo bebé que viene?

Un consejo genial es guardar la mantita del hospital con la que durmió el bebé la primera noche y ponerla en la cama del perrito.

Yo me quedé en el hospital un par de noches y mis papás se encargaron de que Lola se acostara siempre con la mantita para acostumbrarse al olor de Santiago.

Preséntalos apenas llegues a la casa: saluda a tu perrito como lo haces siempre, y con el bebé todavía en la silla del carro, deja que tu perro lo olfatee (siempre con supervisión).

¡Eso es todo! Nada demasiado dramático. Dales tiempo para conocerse. Tu perro va a entender que un nuevo cachorro se unió a la manada.

Te prometo que comenzarán a hacerse amigos apenas el bebé comience a comer, alrededor de los 6 meses, y se convierta en el repartidor de premios preferido de tu perrito.

Con respecto a los celos: después de mi experiencia, no creo que se pongan ralmente celosos, pero sí sienten mucha curiosidad por el nuevo miembro de la familia. No les gusta que el bebé llore y pueden ponerse muy ansiosos por eso.

Sé paciente, déjalos participar en alguna de tus rutinas. Recuerda que si tú no estás cómoda, tu perrito lo va a sentir.

Cuando estaba amamantando a Santi recién nacido (básicamente 24/7 jaja), Lola tenía permiso para sentarse en la mecedora conmigo. Al principio, solo en mis pies. Cuando me sentí más cómoda, al lado mío. Esto se convirtió en nuestro ritual diario hasta ahora, nueve meses después.

Siempre tratamos a Lola como lo hicimos antes de convertirnos en padres, y cuando estoy demasiado ocupada con Santi, mi esposo le presta bastante atención (y viceversa), y así nunca se siente abandonada.

También paso tiempo a solas con ella todos los días. Me ayuda a recargar y mantiene nuestro vínculo intacto.

Disfruta de tu nueva familia. Te vas a dar cuenta de que todos los clichés son ciertos: tu “primer hijo” se ve enorme al lado del pequeño (sin importar la raza).

Sigue tu intuición: todo encajará en poco tiempo. Y si aún tienes dudas, te recomiendo el documental Babies en Netflix. En el episodio # 2, hablan con más detalle sobre cómo los hogares con mascotas son beneficiosos para los bebés.

¿Estás embarazada? ¿Tienes bebés y mascotas en tu casa? ¡Me encantaría saber tu experiencia! Cuéntame abajo en los comentarios.